Foto cedida por manifestante
Por Burgos Dijital
Un 3 de marzo de 1976, hace 43 años, 5 obreros fueron asesinados por la Policía en Vitoria, cuando miles de trabajadores que llevaban meses en huelga celebraban una asamblea en la iglesia de San Francisco.
La Policía quiso disolver la asamblea con gases lacrimógenos por las ventanas y huecos de la Iglesia y disparos que alcanzaron a cinco obreros: Pedro Martínez Ocio, Francisco Aznar, Romualdo Barroso, José Castillo y Bienvenido Pereda, muriendo todos ellos.
Hoy 43 años después miles de personas han salido a la calle en Vitoria-Gasteiz para rememorar a los cinco compañeros asesinados y reclamar “verdad”, “justicia” y “reparación”, convocados por los sindicatos de Euskadi, ELA, LAB, ESK y Steilas, a las seis de la tarde desde el barrio de Zaramaga donde tuvo lugar el trágico suceso, un “crimen de Estado”, del que todavía queda pendiente que se haga justicia.
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