Caravana contra el fracking. Merindad de Villarcayo 2012
El Diario de Burgos en su edición dominical del 17 de abril titula a través de la pluma de G. Arce “El fracking se aletarga ante los bajos precios del crudo“. Pero a juzgar por lo que no informa y por la subjetiva interpretación de la actualidad, parece que lo que quiere aletargar son las conciencias y las ganas de lucha de los habitantes del norte de Burgos.
El panfleto radical y carpetovetónico en el que lo han convertido sus familiares-accionistas y algunos de sus principales opinadores, como el nostálgico e intrigante Pérez Henares, producen vergüenza ajena.
De primer plato un desprecio absoluto hacia las miles de personas de todas las edades y condiciones que están poniendo su granito de arena en Burgos, en Cantabria, en Álava, en Vizcaya… Expresa la cronista que la ralentización de sondeos, prospecciones y explotaciones se debe única y exclusivamente a la bajada de los precios del crudo: ¡¡cómo si esta se llevara produciendo en los últimos 5 años!! Las cifras ahí están y lo que sí es evidente es que las asambleas, las movilizaciones y la sensibilización social son las que han conseguido que el veneno no salga por nuestros grifos hasta ahora.
Eso sí, los expertos, es decir los directivos y cuadros de mando de BNK Petroleum y los mercenarios de la pluma, amenazan con volver, puesto que según sus cálculos esperarán a que salgan las cuentas, ya que “España es deficitaria en energía“.
Resulta realmente complicado qué significa esa afirmación porque en relidad en un país de libre mercado como el nuestro las empresas no están obligadas a ofrecer la energía producida aquí para el confort y disfrute de los nacionales: es decir que Iberdrola produce la energía eléctrica en un salto de agua de nuestra provincia y se la vende a un distribuidor francés. Así que lo del “déficit” no cuela: otra trampa dialéctica más del sistema.
Caravana contra el fracking. Merindad de Villarcayo 2012
El publireportaje, lleno de afirmaciones vehementes y datos relativos y no contrastados, nos vende que la explotación de gas es barata, pero aún no sabemos si en esos pretendidos estudios se tendrán en cuenta los daños medioambientales a largo plazo. Entendemos que no, puesto que hasta ahora dichos costes no aparecen nunca en los estudios de viabilidad económica. O quizás sea porque ante los irreparables daños por catástrofes medioambientales acontecidas en nuestro país como “Aznalcóllar” en Doñana, el “Prestige” o el terrible, escandaloso y oculto asunto de los vertidos de lindano por Inquinosa en Sabiñánigo (invito a los lectores que investiguen), las multinacionales saben “que se irán de rositas“. Basta con esos ejemplos para decirle a BNK que se vaya por dónde vino, que nuestros medios locales y sus “periodistas” ya se bastan solos para intoxicarnos.
Por contra al libelo extremista, muy dado a ocultar las desfachateces de nuestra corrupta burguesía, se le ha olvidado contar a los burgaleses que mientras dormimos el monstruo cabalga a lomos de la depredación. Cierto es que todo va a un ritmo más lento del esperado por los matones medioambientales, pero si el Estado modificó la normativa hace más de un año para beneficiar económicamente a quién cediera la tierra para emponzoñar a sus vecinos, el Partido Popular, esta vez aquí en Castilla y León, sigue construyendo el puente de plata y colocando la alfombra roja a la fractura hidraúlica.
La Consejería de Fomento y Medio Ambiente está preparando un Decreto por el que se modifica el Reglamento de Urbanismo de Castilla y León en relación con la regulación de las actividades extractivas en suelo rústico. (Ver aquí)
El Reglamento especifica que a través de los instrumentos de planeamiento se califican los terrenos mediante criterios generales de clasificación del suelo y en lo que nos afecta realiza subclasificaciones hasta llegar a los criterios específicos para el suelo rústico con protección agropecuaria.
El proyecto del futuro decreto justifica la modificación expresando que „en el suelo con protección agrícola, y en respuestas a las demandas del sector y de la Consejería competente en la materia, se abre la posibilidad de evaluar la compatibilidad de las actividades extractivas mediante el correspondiente procedimiento de autorización excepcional.“ De esta manera el ejecutivo de Herrera reconoce sin pudor que la presión del lobbie es fundamentalmente la causante de los cambios normativos, recogiendo sus aspiraciones al introducir y encajar en el armazón de la ordenación del territorio el concepto „actividades extractivas de naturaleza no convencional“, es decir la fractura hidraúlica.
Caravana contra el fracking. Merindad de Villarcayo 2012
Así mientras parece que a través del proyecto se busca el máximo nivel de protección del „suelo rústico con protección agropecuaria“, lo que hacen es introducir en el art. 57 „Derechos excepcionales en suelo rústico“ una nueva forma de obtener gas y destruir nuestros recursos naturales.
Y para aquellos que sigan creyendo en los Reyes Magos, en las verdades del Diario de los Méndez y en el buen funcionamiento de las instituciones, entiendo que estén pensando que las Evaluaciones de Impacto Ambiental ya están para resolver este tipo de „nimieces“ y que el que escribe no es más que un indocumentado paranoico que quiere contagiar al vulgo de idiocia e ignorancia.
Por mi parte sólo espero que antes de que me piten los oídos, echéis un vistazo a los miembros de las Comisiones de Urbanismo y de Medio Ambiente que dan el visto bueno o malo a las actividades clasificadas y reto a quien lo haga a que encuentre en alguna de ellas una mayoría de empleados públicos que no estén nombrados a dedo por el Director General o Consejero de turno.
Por cierto, a qué espera C’s, el nuevo partido de la regeneración democrática, a romper su pacto de legislatura con aquellos que ponen palos en las ruedas de las comisiones de investigación, que presionan hasta el chantaje a empresarios que no se pliegan a sus políticas, que partidizan y corrompen las administraciones públicas y que, en última instancia, están empeñados en despoblar el territorio. ¡¡Qué caro nos sale vuestro capote, querido Luis!!
