Por Burgos Dijital
Más de doscientas personas han acudido a rendir homenaje al último fallecido por culpa de un accidente en la N-1, que tuvo lugar hace tres meses. Debido al tiempo transcurrido desde el accidente, para la Administración esta muerte no contabiliza como víctima de accidente de tráfico, lo que no ha impedido que la Plataforma de Afectados por la N-1 se haya concentrado para seguir exigiendo medidas que eviten el reguero de siniestros que provoca esta carretera, y para recordar al joven que perdió la vida a la altura de la localidad de Rubena, Burgos, al colisionar su vehículo contra un camión el pasado mes de octubre.
Mikel Alonso es una víctima más de la inoperancia, desidia e irresponsabilidad política que planea sobre la falta de seguridad que sufren quienes se ven obligados a transitar por esta vía, una de las más peligrosas de la red de carreteras estatal, debido a que la única alternativa es la autopista de pago que transcurre en paralelo y que, pese al tiempo transcurrido desde su amortización, no se libera.
Recientemente, el ministro de Fomento, De la Serna anunciaba que liberar autopistas es “inabordable por el elevado coste que supondría”. De nuevo promesas y palabras vacías, que se lleva el viento; pero la Nacional 1 continúa segando vidas, y de eso no se habla. ¿Cuál es el coste de las vidas de las víctimas?
Una cruz negra y un ramo de flores eran instalados en el lugar donde Mikel sufrió el accidente. Desde la Plataforma de Afectados por la N-1 recuerdan que su labor necesariamente debe ser apoyada por todas las personas afectadas y que se solidaricen con su causa, para poder tener la repercusión que precisan y merecen.
Se ha agradecido, especialmente, la colaboración de las empresas de autobuses que han apoyado la movilización: Excursiones Vadillo, desde Briviesca, y Soto y Alonso, desde Burgos.
Este nuevo corte de la circulación se ha llevado a cabo en día de diario, como se viene haciendo desde el pasado verano, para dar mayor visibilidad a la cantidad de tráfico que soporta esta vía, sobre todo de tráfico pesado. La retención, tras los 5 minutos de corte, alcanzaba más de dos kilómetros en cada sentido, y se podía apreciar la elevadísima cantidad de camiones que se acumulaba.
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