Por Burgos Dijital
Varios centenares de personas han acudido esta mañana a la llamada. Un nuevo corte en la Nacional 1 para honrar la memoria de las personas que han perdido la vida en el asfalto -poco más se puede hacer ya por ellas- y para denunciar la situación de este tramo de 84,3 kilómetros que se cobra demasiadas víctimas cada año debido a su alta peligrosidad.
Una marcha ha salido a pie desde Briviesca hasta el km 278, a la entrada de la localidad, a las 12:00 h del mediodía, para proceder a la concentración y corte de la carretera a la altura del primer accidente producido esta semana (de los tres que han tenid0 lugar y que se han cobrado la vida de 5 o 6 personas, dato que la Plataforma de afectados por la N1 no se atreve a confirmar ya que los datos oficiales hablan de 5 víctimas, pero los servicios sanitarios y bomberos que atendieron el último siniestro hablaban de 6).
Varios son los condicionantes que suponen que esta carretera sea una de las más peligrosas del estado. El principal, la sobrecarga de tráfico -ordinario, pero sobre todo pesado y, en algunos casos, incluso especial- que ahogan esta vía transnacional. Pero además, la falta de voluntad política de acabar con esta situación, dado que en paralelo a esta vía discurre la Autopista AP1, amortizada desde hace 26 años, pero que prorroga su concesión sin solución de continuidad. Las promesas de una próxima liberación de la autopista (para 2018) no convencen a los vecinos de la comarca, que temen que de nuevo sean promesas vanas.
¿Quién se lucra con la recaudación de la autopista, que las autoridades públicas no se atreven a acabar con dicha concesión? Hay quien sospecha incluso que cuantos más accidentes se produzcan en la nacional, mayores pueden ser las cantidades que se recojan en la autopista -la falta de seguridad de la nacional alentaría a muchos usuarios a transitar por la AP1-. Por otra parte, las obras realizadas por el Ministerio de Fomento en esta vía, en ocasiones lejos de suponer mejoras han agravado la situación (como es el caso de los muretes de hormigón colocados en la entrada de Briviesca, que convierten la carretera en una trampa sin escapatoria posible en caso de accidente).
A la concentración han acudido algunos representantes políticos (alcaldes y concejales/as de pueblos de la zona y el diputado provincial por Imagina Burgos, Marco A. Manjón), pero se echa de menos que acuda a las concentraciones una mayor representación política de los pueblos del entorno afectado por el trazado de este corredor que conecta con el norte de la península y con Francia. La mayoría de afectados lamenta que “primen los intereses económicos privados y no las vidas humanas”. Así mismo, lamentan el silencio de los medios nacionales sobre esta situación.
La Plataforma de afectados por la N1 continuará con próximas movilizaciones (la concentración de hoy respondía al primero de los tres accidentes registrados esta semana) y no descarta endurecer su postura para continuar exigiendo medidas que ayuden a mejorar la situación de quienes transitan por la N1.
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