Por Eduardo Nabal
Heredero de la comedia del arte italiana fundador de una compañía de dos personas junto a su mujer, la también actriz y dramaturga Franca Rame, autora de sabrosos monólogos. Darío Fo ha sido uno de los cómicos más incómodos para la derecha italiana y europea durante las últimas décadas con sus virulentas e irreverentes arremetidas contra el Vaticano, la corrupción sociopolítica y algunos tabúes vigentes en la Italia de ayer y hoy. Su compañía se refundó varias veces con las vanguardias de los años 70 y el teatro político y de protesta en Italia. Las luchas sociales de la década de los 80 le condujeron a tratar temas como la desobediencia civil en la famosa Aquí no paga nadie o en Bocinas, trompetas y frambuesas.
Recientemente apoyó la candidatura de participación popular liderada por Beppe Grillo. Su época de mayor reconocimiento fueron los años setenta y ochenta cuando algunas de sus piezas satíricas fueron ferozmente censuradas por la Iglesia dentro y fuera de su país y también en diferentes cadenas de televisión privadas y públicas. A pesar de la polémica de su escritura y su expresividad desmesurada fue ganador del Premio Nobel de Literatura en el año 1997.
Entre los objetivos de su mirada ácida y de su tradición bufonesca también la mercantilización de la cultura y el anquilosamiento autocomplaciente de las instituciones. Bufón, actor total, controvertido en cuanto a la verdadero dimensión de su talento como actor consiguió llenar escenarios durante muchos años al servicio de la parodia social y junto a su mujer logró fama internacional con piezas destinadas a hacer pensar y a la vez a hacer reír y romper tabúes . Entre sus obras más celebradas y representadas se encuentran “Muerte accidental de un anarquista” (convertida en un clásico) y “Aquí no paga nadie”, ambas representadas en Burgos.