
Por Burgos Dijital
El veroño burgalés sonrió, y el blanco con el que se ataviaron los participantes relucía en toda la Plaza Mayor. No fue un encuentro masivo, pero sí significativo teniendo en cuenta que se trataba de la primera movilización. Medio millar de personas se dieron cita en la Plaza Mayor de Burgos para apoyar la convocatoria realizada a través de las redes sociales que exige una salida pacífica y dialogada al problema político-social de Cataluña y su encaje en el estado español.
Había un cierto aroma a 15-M en el ambiente, y no sólo por que la convocatoria partiera de una forma espontánea de las redes sociales, ni porque también se vieran rostros que tuvieron protagonismo en la primavera de hace unos años. Hoy como antes la gente congregada volvía a expresar que no se sentía representada por unos políticos profesionales que promueven irresponsablemente el odio, y un enfrentamiento de consecuencias desconocidas pero que no pagarán ellos. Quizás por eso pocos rostros conocidos de la política municipal apoyaron la convocatoria.
Pronto se podrá ver, si a tenor de lo que ocurra en el Estado tras esta primera convocatoria, se conforma un movimiento vigoroso. Todas las personas que deseen vivir en un país en el que la gente no sólo tenga derecho a recibir golpes y a colgar banderas de colores cuando los amos agiten la campanilla deben estar alerta. Hablaremos.