Imagina Burgos desvela los gastos “black” del alcalde Javier Lacalle

El alcalde de Burgos en un pleno del Ayuntamiento Foto de archivo

Por Burgos Dijital

Imagina Burgos ha desvelado los gastos que demuestran lo que muchos ya intuían: que el Ayuntamiento se ha ido convirtiendo en un cortijo particular de Javier Lacalle y el grupo popular.

Nada nuevo si recordamos las dimisiones obligadas en la anterior legislatura de los concejales Rebollo y Eduardo Villanueva, éste último imputado y declarado inocente al no poderse demostrar que los gastos inmensos ocasionados por él mismo en datos telefónicos se debían a una negligencia personal, las relaciones personales de Lacalle con Miguel Méndez Ordóñez, con regalo de viaje a Niza incluido, las facturas que Ibáñez quiso pagar a la empresa T-System sin que ésta realizara su trabajo o las escandalosas gestiones de Lacalle en asuntos como el bulevar de Gamonal o el proyecto del “Coliseum” con el mismo protagonista beneficiado: el constructor y empresario de numerosos medios de comunicación Méndez Pozo.

En esta ocasión, como ya ha informado eldiario.es, Diario de Burgos ha demostrado ser un medio de difusión y no de comunicación, una mera correa de transmisión del Partido Popular que desacredita una vez más su supuesta función social de información al servicio de la sociedad, pero esta vez con el dinero de todos.

Este periódico publicó un monográfico especial el 12 de abril de 2012, coincidiendo con la inauguración de las obras del bulevar para unir los barrios de Gamonal y Capiscol, en el que se incluyó una entrevista  con el alcalde en la que promocionaba las obras del bulevar que ese día se inauguraba.

Imagina revela que el periódico de Méndez Pozo aún tiene sin cobrar una factura de 1.180 euros por esta autopromoción del Alcalde. La factura se emitió el mismo día 12 de abril de 2012 y el Ayuntamiento la recibió 14 días después. El concepto de facturación es “Entrevista Alcalde Ayto BurgosBulevar.Ftra PUB04-4” y se atribuye al gabinete de prensa.

El escándalo acaba de comenzar, ya que Imagina denuncia que el Ayuntamiento gobernado por el partido popular, y apoyado a día de hoy por Ciudadanos, ha gastado más de 160.000 euros en publicidad, 206.000 euros en protocolo y otros 35.000 en vinos españoles. Estas son algunas de las facturas que el Ayuntamiento está tramitando para ser pagadas, tal y como se recoge en un informe de la intervención general municipal.

Esta cifra que roza ya los 400.000 euros en conceptos de difícil justificación son sacadas a la luz en un momento en el que la administración local presidida por Javier Lacalle ha recibido duras críticas por asuntos como la falta de suministros de equipos de protección individual a los trabajadores del nuevo plan de empleo municipal, por el diminuto parque municipal de viviendas para familias desahuciadas o en riesgo de exclusión social o por el deterioro de multitud de barrios de la ciudad por una supuesta falta de fondos que, a la luz de las circunstancias, parece poco más que una broma.

Imagina Burgos expresa con sarcasmo “la conversión de Lacalle en crítico gastronómico“, puesto que “entre los gastos “black” se encuentran  77 menús degustación  a 45 euros de media“. Al parecer al Alcalde no sólo hay que pagarle el sueldo y un escolta, sino que también obtiene sobresueldos que hasta ahora se desconocían.

Quizás por eso Javier Lacalle haya mantenido a personajes tan inmorales como Fernando Gómez, quizás porque individuos como Gómez podrían tener mucho que decir.

Mientras tanto el socialista Fernández Santos, en un ejercicio de lamentable demagogia, se ha pasado la semana criticando, a pesar de haber votado finalmente a favor, que en el último pleno Imagina Burgos planteara una proposición en el Ayuntamiento para exigir la dimisión del concejal Fernando Gómez. Cuando estas actuaciones deberían de ser la tónica general de cualquier grupo político que pretenda limpiar las indecencias producidas en cualquier administración.

Mientras Imagina prioriza la decencia y la moralidad en las responsabilidades públicas, el PSOE busca única y exclusivamente la debilidad del enemigo político para convertir el Ayuntamiento de todos en un tablero de juego dónde ganar una partida. Hoy 15 de mayo comprobamos como los viejos partidos siguen creyendo que el país es suyo pero ahora su impunidad tiene un precio.

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