Por Basilio Villacorta Fernández
Sé que no puedo ser objetivo pero ¿acaso alguien lo es cuando habla desde sus experiencias vitales, desde sus sentimientos?
Yo formé parte de ese Podemos incipiente. No fui el primero en llegar, ni de lejos, ni tampoco seré el último en abandonar el proyecto, a buen seguro. Se podría decir que “aposté” por algo y perdí, creo que con cierta deportividad.
He de decir que no me arrepiento de la experiencia, aunque corta, muy necesaria para la sabiduría que se debe de acumular si no limitas tu vida a las obligaciones y a las evasiones como revanchas ante las primeras.
Otra cosa con la que “gano mi tiempo” es escribir y aportar lo que puedo en convertir este espacio en una suerte de artefacto de contrainformación ante la brutal e intolerante saturación de los medios conservadores y liberales que hegemonizan, manipulan e intoxican aquello que se ha dado en llamar opinión pública. En nuestra provincia es una obviedad y no es necesario explicar el daño que este fenómeno nos inflige en términos sociológicos y económicos.
Formo parte, y me siento muy orgulloso, de una “comunidad” de personas que con el tiempo han acabado siendo amig@s y me acuerdo y guardo mucho cariño por aquell@s que estuvieron y que lo dejaron por diferentes circunstancias. No podía ser de otra manera teniendo en cuenta la confianza y la camaradería que es necesario tener cuando le sacas los colores al poder y, de vez en cuando, manejas información sensible. Y todo ello, además, de manera generosa, altruista, sin buscar beneficios personales…
Lo dicho: un medio para un fin, como expresábamos en nuestro antiguo blog. Y siguiendo los pasos de nuestras referencias hermanas: el inimitable “Perdigón”, el rebelde “Diario de Vurgos”, el osado “Sombras en la ciudad”… Todos unidos, con nuestras diferentes particularidades, con el mismo objetivo: enseñar y contar lo que el poder no quiere que nadie conozca. En realidad, este debería de ser el objetivo del periodismo pero ni nosotros somos periodistas ni los que dicen ser periodistas ejercen como tales.
A pesar de ello, ponemos todo nuestro empeño en hacer las cosas lo mejor que sabemos y me siento feliz al comprobar el cariño de la gente que nos sigue, de los ánimos que hacen que continuemos empleando nuestra energías y tiempo en este proyecto e incluso de las veces en que profesionales del periodismo nos han felicitado, y algunos odiado, por nuestro trabajo. Las horas en las que podría estar tomando unas cañas, “echando un partido”, haciendo un curso, disfrutando de la familia y de l@s amig@s… las doy por bien empleadas cuando veo que el resto de mis compañer@s se esfuerzan aún más que yo.
En cualquier caso, siento una especial empatía con el compañero y amigo dedicado y entregado – porque quien lo conoce sabe que está y que lo es – a la información gráfica: fotografías, vídeos, montajes gráficos… Nadie se hace una idea del trabajo que ello conlleva, de las horas y días que dedica a la Causa. Sólo una inmensa ilusión, una inmensa esperanza, puede mover a alguien a hacer esto sin buscar nada a cambio. Y en estos tiempos decadentes de especulación, de competencia infinita, de la búsqueda permanente del deseo personal automerecido, del tráfico de influencias y del narcisismo como motor de la promoción social, antivalores burgueses que se han introducido hasta el tuétano de tod@s nosotr@s – y digo de tod@s -, este ejemplo, este espíritu tiene aún más valor.
Por eso, cuando un compañero nos comentó a tod@s a las 12 y media de ese día que Podemos Castilla y León nos había solicitado la posibilidad de utilizar los vídeos de Bdj relativos al HUBU una alarma se encendió en mi interior. Bueno, más que una alarma, fue un resorte el que se disparó en mi cabeza y, siendo sinceros, dije taxativamente que NO. Y ello a pesar de que el autor de los vídeos había dado el sí entre nosotros, sin reflexionarlo, movido como siempre por su increíble generosidad.
La discusión fue larga y dura. No era la primera vez que estábamos ante una encrucijada, no era nuestro primer debate con posiciones encontradas que podían abrir brecha en la confianza necesaria que debemos tener. Espero que no haya sido así: yo di mis opiniones y otros dieron las suyas.
Lo cierto es que siempre, y eso se puede comprobar fácilmente, hemos hecho lo posible por marcar distancias no con las personas que forman o han formado parte de los partidos políticos, sino con las propias organizaciones. A causa de esta política hemos perdido colaboradores, algunas relaciones se enfriaron y hemos recibido ciertas presiones. Pero gracias a esa decisión, nos hemos sentido libres e indepedientes frente a IU, frente a Anticapitalistas, frente a Podemos… Incluso, como much@s sabreis, algun@s hemos formado parte de algunas de estas organizaciones políticas y de otras y creo que a pesar de las fricciones, presiones y momentos de tensión, hemos sido lo suficientemente madur@s como para soportar esas bipolaridades y que el fin último prevaleciera.
Sí damos cobijo en nuestro espacio, aunque eso ocurre pocas veces, a la opinión que expresan las personas que hacen política dentro de los partidos y las instituciones pero siempre con la condición de hacer visible su identidad personal y política.
Por otro lado, en lo que respecta al vídeo incluido en la campaña de twitter de Podemos Castilla y León, 8 horas después de que yo diera el NO a ese preaviso, ya estaba montado y desplegado en la red. ¡¡Que nadie se escandalice!! Todos los vídeos e imágenes utilizados en nuestra web tienen una fórmula jurídica que permiten su uso sin necesidad de solicitar permiso siempre que se realice sin fines comerciales. Este era el caso y hasta ahí nada se puede decir sobre la legalidad del asunto.
Nos comunicaron el uso cuando no tenían porque hacerlo y han respetado la fuente con nuestro sello incluido en el vídeo cuando podrían no haberlo hecho. Visto desde este punto de vista, todo un ejercicio de trasparencia y de cortesía. Pero si nos atenemos a las circunstancias de las que a continuación hablaré y comprobamos que en tan solo 8 horas después ya estaba disponible en cualquier móvil, pienso que la decisión de Podemos ya estaba tomada. No puedo creer, y me baso en la experiencia, que algo potente que se utiliza para una campaña política seria se publique en tan poco tiempo, aún más si tenemos en cuenta la cantidad de personas que deben de opinar al respecto y la pirámide de “vistos buenos” conformada. En mi pueblo a eso se le dice “actuar por la vía de los hechos consumados”.
¿Y por qué yo dije que no? Al fin y al cabo podían hacerlo y tod@s podemos pensar, y de hecho algun@s compañer@s así lo expresaron, que tanto nosotr@s como las organizaciones políticas con las que compartimos muchas afinidades ideológicas tenemos el mismo fin. Aunque yo, desconfiado por naturaleza de las instituciones y de las organizaciones que se ven sometidas a esas reglas de juego, me pregunto ¿utilizamos los mismos medios para llegar al Fin? ¿son importantes los medios? ¿tendremos realmente el mismo Fin?
Podemos ha actuado políticamente y desde el minuto 1 para intentar la reversión de la desastrosa gestión de los populares en la sanidad de Castilla y León y, concretamente, el rescate del HUBU, de eso no hay duda. Se han sumado a todas las movilizaciones, han respetado el camino seguido y marcado por la Plataforma en defensa de la sanidad pública, han impulsado la Comisión de Investigación y ahora están informando a la gente de lo que allí se ha cocido hasta ahora.
Por nuestra parte y en lo que nos tocaba, siempre que alguien de la Plataforma nos ha dicho que colaboráramos allí hemos estado y estaremos: informaciones transmitidas o no por la Plataforma, reportajes, cobertura de actos, entrevistas, difusión…
Como parece, ambas partes hemos cumplido y nos hemos encontrado en el mismo fin. Aunque, en este caso, sería justo recordar que también coincidimos con lo que queda de Izquierda Unida y con l@s hipócritas socialistas, acostumbrad@s a hacer y decir en un territorio “so“ y en otro “arre“.
Hasta ahora todos los argumentos son contrarios a mi reacción. Y entonces, ¿por qué dije NO?
Muchas personas, a estas alturas, estarán pensando que mi falta de generosidad se puede deber a viejas rencillas personales, dado mi antiguo lazo. En mi defensa puedo decir, y en este caso también en la de mis compañer@s que siempre hemos sido respetuosos y pulcros en todas las decisiones que tomaran las organizaciones políticas afines, también con Podemos. Y que nos hemos cuidado muy mucho, en algunos casos a nuestro pesar, de mordernos la lengua antes de hacer daño para no perjudicar las ilusiones y las esperanzas que tanta gente ha puesto en esta herramienta política, más si cabe con el interminable ciclo electoral que hemos sufrido. Much@s lo saben y gracias a ello pueden seguir exhibiendo una imagen pública aceptable.
Lo que me molesta, y me consta que no soy el único que lo piensa en este sentido, es que Podemos Burgos, y me atrevo a decir Podemos Castilla y León, es una organización floja, sin fuelle y débil por la absoluta dependencia de las decisiones tomadas en Madrid. Así fue desde el principio cuando Iglesias tomó personalmente el timón de la organización territorial e impulsó y promovió a personas que aún trabajaban para IU y tenían puestos de alta responsabilidad política, personas que se habían permitido llamar al orden a otros compañeros por visitar otros espacios, personas que pasaron del rojo al morado como un golpe se convierte en hematoma.
Evidentemente estas heridas estarían cerradas con el tiempo si l@s protagonistas hubieran tenido la necesidad y la posibilidad de hacerlo pero, por extrañas circunstancias, Podemos Burgos no ha sabido, al menos hasta ahora, tejer un mínimo “buen rollo“, unos mínimos canales de confianza y de naturalidad espontánea con la mayor parte del tejido asociativo, activista y sindical de nuestra provincia y región. Tampoco, desde mi punto de vista, con Burgos Dijital…
Si todo fuera saludable y natural, las personas encargadas en Podemos Castilla y León de montar la campaña informativa sobre la sanidad y el HUBU, habrían tenido a bien informarnos mucho tiempo antes y ponerse en contacto con nosotr@s a través de sus compañer@s de Burgos para pedirnos este material y en una charla con cerveza de por medio la cosa se habría cerrado de manera satisfactoria, de lo cual probablemente hasta nos sentiríamos orgullos@s. Pero no fue así…
Si todo fuera saludable y natural, además de respetar el trabajo y la impronta del mismo, como sí han hecho, ni se les hubiera pasado por la cabeza poner su nombre en el propio vídeo, ya que ni han colaborado un minuto de su tiempo en recoger y trabajar esa información gráfica, por lo que de paso informo a las personas que nos siguen que, en ningún caso, ha sido una colaboración.
Si todo fuera saludable y natural, sería fácil de entender que los medios, los valores, las conductas y los comportamientos son tan importantes como los fines. Como dijo en una reciente entrevista José Sacristán “a estas alturas de la vida, a la izquierda solo le pido honestidad”.
Así, no podemos. Así no, PODEMOS.
Hablan de participación ciudadana y la desconocen, se sientan con el poder para quitar la dotación del G-9, y no hablan con nadie y ellos tienen razon, mal vamos por ese camino
Como siempre, tus análisis son profundos y además constructivos.
Son un residuo catecumenal como el PSOE e IU. Los necesita el país para seguir jugando a Tres Navíos en un Mar…Eso: el buque del PP por donde se oyen los cantos de sirena que Podemos entona beatificamente. Les navegan y les escoran a babor y a estribor mareándoles, cual peonzas bailadas por una vanidad que surte de tenebrismo el barbecho de este pedernal castellano, nacional , urbano.
¿A estas alturas a quien queréis contar cuentos?